Desde mi ventana
Acababa de terminar la temporada taurina en la Santamaría de Bogotá, una temporada luchada, bajo ataque, ante la mirada complaciente del gobierno capitalino, el gobierno de la "diversidad", claro, lo de hoy, es una diversidad inquisidora. En los tendidos, se escucharon porras políticas y graciosas, una de esas fue "abajo el Coronavirus" y los que pudimos, respondimos con fuerte voz "abajo". Todo parecía un chiste lejano, hacíamos planes, mirábamos el futuro con expectativa. Planeábamos viajes, cumpleaños, salidas, encuentros y desencuentros. Pero el mundo que conocíamos, se pausó, quiero creer que así fue, que no desapareció por un virus que voluntaria o involuntariamente, se le escapó a China, quiero creer, que en un futuro cercano, muy cercano, Dios le va a dar "play" a ese mundo y volveremos a encontrar eso que nos movía. Para muchos, la vida pasó o sigue pasando por la ventana, viendo amigos y conocidos caer por el virus, viendo a otros recu